viernes, 31 de diciembre de 2010

2010

Este año…  Bueno, no está mal, al menos ya he encontrado una forma de empezar.

Este año ha sido totalmente diferente al resto.  Ha sido un año de cambios, unos por voluntad propia, otros inesperados y otros forzosos… Pero bueno, supongo que todo cambia y hay que aprender a vivir con ello.

Este año lo empecé acompañada de alguien a quien aprecio muchísimo. Lo empecé con gente a la que yo consideraba amiga, lo empecé con abuelo, lo empecé con una idea clara de cómo iba a ser mi futuro. Sin dudas ni mayores preocupaciones. Lo empecé sabiendo qué quería hacer, con quién, cuándo y cómo. Pero para variar, quería saber demasiado.

Todo se empezó a nublar, o a aclarar, según se mire y en el momento en el que se mire. Fui viviendo muchas experiencias, conociendo a mucha gente nueva, la cual ha conseguido hacerme reír, ayudado, enseñado o simplemente hecho pasar unos buenos momentos, aunque también los hubo muy malos. También fui redescubriendo a mi familia, aunque es verdad que dudo que la haya redescubierto totalmente.

He intentado probar cosas nuevas, aficiones nuevas, abrir mi mente y dejar los prejuicios a un lado. He descubierto la fotografía y la tranquilidad que me aporta. El bienestar que ofrece el conocimiento, y el decir “No, gracias” a un solomillo. La felicidad de un té caliente con una manta al lado de un radiador. Los beneficios de pensar antes de actuar, y los beneficios de actuar sin pensar demasiado. He aprendido a valerme por mi misma a pesar de que necesite estar rodeada de mis seres queridos y varios abrazos a la semana.

A superar los momentos difíciles y ver que todo pasa. Tarde o temprano, pero todo pasa.

Por eso quería desearos un buen comienzo de año, y que el 2011 os aporte más experiencias, sentimientos y conocimientos que las aportadas en el 2010 que dejamos atrás.

Feliz año =)

lunes, 13 de diciembre de 2010

Amienemig@s

   Una de mis amigas me dijo una vez que si no salía a la noche (de fiesta) no iba a conocer a nadie y que cuando todas ellas tuvieran novi@, a mi me entrarían ganas de salir y ya no tendría con quién. A esto hay que añadirle que si no salía de fiesta era porque me aburría o porque no me gustaba el plan que tenían; pero terminé por creerme su versión y llegué a pensar que la única forma que tenía de conocer gente era a la noche.

Ahora, después de 3 o 4 meses, me doy cuenta de que eso es mentira, de que la mejor gente no se conoce de fiesta y que lo importante es aprender a relacionarse en diferentes ámbitos.
Pero durante todo ese tiempo estuve pensando en lo que me dijo y en lo fácil que es condicionar a alguien dando simplemente tu opinión con tono enfadado o incluso seguro.

Cuando pides opinión a tus amig@s lo haces pensando que esa es su forma de ser y de ver las cosas pero que no va a afectarte en la tuya; y es cierto que en un principio no lo hace, pero a la larga, cuando vas tomando decisiones, te vas acordando de esos consejos que te daba una y lo que te recomendaba la otra. Supongo que eso sucede a todo el mundo y que cuando somos nosotros los influyentes, lo hacemos sin darnos cuenta.

Pero ¿qué pasa cuando lo que te dicen lo dicen a posta, intentando cambiar así tu forma de ver las cosas y de vivir la vida? Puede que esto no sea más que una forma más directa de controlar a la otra persona, pero si esto es así ¿interesa tener en tu vida a alguien que te malinfluye tanto?

sábado, 11 de diciembre de 2010

Sex Shop

¿Alguna vez os habéis visto afectados por la vergüenza de entrar en un sex shop?

Cuando vas de compras y entras en una tienda a ver los productos que se venden en ella, lo haces con toda la naturalidad del mundo. Nadie te mira y mucho menos juzga lo que vayas a comprar.
Pero cuando los productos a los que nos referimos tienen relación con el sexo la cosa cambia. Parece que haya una muralla invisible pero gruesa entre la calle y la puerta de la tienda. En ese momento notas todas las miradas de los que caminan por la calle mirándote y casi puedes leer su pensamiento: ¡sera pervertid@!
Una vez dentro también notas la desconfianza del dependiente de la tienda y temes que te haga la típica pregunta de: ¿necesitas ayuda con algo?

Puede que en ese momento te sientas culpable de haber entrado y puede incluso que empieces a pensar como esas personas que paseaban, sintiéndote un pervertido. Es cuando consigues superar esta vergüenza y este sentimiento de culpabilidad cuando te das cuenta de que el sexo empieza a formar parte de tu vida de una manera natural, sin tabúes.

Cuando llega este momento puedes hablar con el dependiente dejándote aconsejar y buscando lo que te gusta realmente, sin problemas ni barreras que te hagan conformarte con lo primero que pilles para salir de ahí cuanto antes para que no te vea la gente o para que el dependiente no se acuerde de ti.

¿Por qué no disfrutar de la sexualidad amplia y tranquilamente?

jueves, 2 de diciembre de 2010

Mandarinas

Como cuando terminas una mandarina y después de haber estado entera dulce, el último gajo te deja un sabor amargo. ¿A quién no le ha pasado?
¿Y luego? Bueno, aquí se encuentran varias opciones:
  1. Resignarse. Vale, la mandarina estaba buena, pero me ha dejado mal sabor, así que eso es lo que hay.
  2. Recordar lo buena que estaba, olvidando ese último momento.
  3. Ir a la cocina y buscar otra mandarina para probar de nuevo. ¿Quién sabe? Igual está incluso más rica.
  4. Comer una manzana
Sin embargo muchas veces no es tan fácil resignarse, recordar, olvidar o cambiar. Muchas veces una mandarina es más que una mandarina, ya que cuando todo va bien se tiende a ver a la mandarina de un modo simple, sencillo, en forma de una unidad naranja y con un olor característico, pero... no es así.

Una mandarina está compuesta por un número de gajos, que a su vez se dividen en cientos de gotitas que forman la pulpa. Con una mandarina se puede hacer zumo, comer al natural, cocinar, ambientar, fastidiar al vecino e incluso usarla como ambientador de manos.

Una mandarina es más que una mandarina, aunque muchas veces nos olvidemos de ello.


lunes, 29 de noviembre de 2010

Cuestión de tiempo

"Que rápido pasa el tiempo". ¿Hay frase más escuchada?

Pero si tan rápido pasa, y tan efímero es todo, ¿por qué es tan importante la edad, o la diferencia de ella, entre las personas? ¿Qué nos hace obsesionarnos y darle tan importancia a los años, meses, días?

Quizás sea la necesidad que tenemos de ir acorde con el resto del mundo, el miedo a envejecer, o el miedo a avanzar demasiado rápido. Pero realmente, ¿qué son dos años menos, cuatro más, ocho o doce?

Doce, eh? Suena a mucho, ¿verdad? A eso me refiero.

Sin embargo he de reconocer que el intervalo de edad en determinadas etapas es mas palpable. Me refiero a la adolescencia, si. Cada vez más niñas, en la mayoría de los casos, de escasos quince años se pueden ver adelantándose al resto. Pero... ¡que hipócrita es esta entrada!

¿O igual no?

A estas alturas aún estoy intentando aprender que la edad es algo más que días, meses o años. Que 17, 18, 19 o 20 son números simbólicos para llevar la cuenta de nuesra vida, pero que en muchas ocasiones no distan  mucho del grado de experiencia, vivencias o cómo lo querais llamar de los 21, 22 o 26.

viernes, 26 de noviembre de 2010

Amigos de amigos

Estaréis de acuerdo conmigo en que cada vez que se empieza una relación se hace con ganas, esperando vivir momentos inolvidables y dar esa persona todo lo que este a tu alcance.
Cuando esto se acaba nuevas personas empiezan a llegar a tu vida y puede que alguna de ellas empiece a formar parte de tu día a día. ¿Y qué pasa si esa persona es amiga de la anterior?

El ser humano por naturaleza es posesivo, a nadie le sienta bien que le quiten lo que un día fue suyo. Aunque ya no sientas nada especial por esa persona si alguien cercano a ti se empieza a interesar o acercar a ella, no te sienta bien. Te parece que es de tu propiedad y que si algún amigo intenta algo es una falta de respeto.
Pero desde un punto de vista más frío, podemos ver que la primera relación ya terminó y que nadie debe nada a nadie. Aún así es muy difícil aceptarlo y entender que no tienes derecho a enfadarte.

Comparémoslo con esa camiseta que tienes en el fondo del armario.

Después de ponerte la camiseta con toda la ilusión del mundo 585 veces la metes al armario y cada vez está más al fondo por su desuso. Es entonces cuando ves a una amiga tuya con la misma camiseta. Sientes rabia, como si sólo tu tuvieras derecho a tenerla.
Es difícil aceptar que hay más gente que la tendrá, pero no puedes hacer nada frente a esta situación; más que pararte a pensar en por qué dejaste de ponértela.
Y, por qué no, irte de compras.


:)


jueves, 25 de noviembre de 2010

¿Sexo o chocolate?

¿Cuántas veces hemos oído que dicho alimento es sustituto del sexo?
Os lo respondo: MILES

¿Se puede saber a quién narices se le ocurrió semejante sandez? Desde luego aquí se podría aplicar el dicho de... Quien no se consuela es porque no quiere.

El mito viene de que el chocolate también libera estrés, pues ayuda a generar endorfinas, que son sustancias del cerebro para hacerte sentir bien y a activar tu ánimo. Aún así, las endorfinas que se generan en un buen acto sexual no se comparan ni con treinta tabletas...
Sin embargo buscando un poco por Internet, he descubierto 20 razones por las que el chocolate es incluso mejor:

1 El chocolate es mejor porque si no esta duro, satisface de la misma forma.
2. Uno puede comer chocolate en el auto sin ser interrumpido por los policías.
3. Se puede comer chocolate delante de los padres.
4. Si se. muerde con fuerza, el chocolate no grita ni reclama.
...
9. Al chocolate no le importa si se es virgen o no.
10. Uno puede comer chocolate cualquier día de la semana en cualquier momento y en cualquier sitio.
11. Uno nunca es muy joven o muy viejo para comer chocolate.
...
13. El tamaño del chocolate no importa, lo que importa es el placer que proporciona.
14. No duele comer chocolate por primera vez.
...
18. Nadie termina una relación por falta de chocolate.
...

http://www.tonterias.com/2005/03/que-es-mejor-el-chocolate-o-el-sexo/

Lo dicho, a falta de una tableta masculina, buena es una chocolateada.

Erotismo

Definición gráfica.


domingo, 21 de noviembre de 2010

Abstinencia

Todos nos hemos planteado alguna vez intentar hacerlo, intentar pasar un determinado periodo de tiempo sin sexo para conseguir algo, pero... ¿Qué es lo que queremos conseguir?

Algunos se lo plantean por el simple hecho de querer demostrar a alguien o a si mismos que pueden pasar ese tiempo sin el placer que el sexo les proporciona. Otros pueden hacerlo como forma de intentar olvidar algo o alguien que ha podido causar un mal recuerdo. La última explicación que se me ocurre es la de querer centrarte cuando estas desmadrada, pensando que así verás las cosas más claras; ya que terminamos por creernos que el sexo lo complica todo.

Las razones pueden derivar en muchas más, aunque no sé cuántas de las personas que se lo plantean terminan por hacerlo. Puede estar bien no andar de flor en flor, pero si te apetece, se te plantea la oportunidad y no tienes ningún compromiso ¿Por qué vas a evitarlo? ¿Por qué te vas a quedar con las ganas?

En mi opinión es fácil pensar en la teoría (X días sin sexo, yo puedo), pero estaría bien ser capaz de no sentirte mal si a la hora de la práctica la cosa no va como habías pensado; al fin y al cabo el estado de ánimo varía y las ganas también.


Es mejor arrepentirse de haber hecho algo, que arrepentirse de no haber hecho nada

lunes, 15 de noviembre de 2010

Seda o cuero


Dos palabras bastante gráficas, ¿no creéis?
Está claro que todo depende del momento, y que si siempre optáramos por un material la situación se convertiría en monótona. Por mucho morbo que den unos golpes, tirones o mordiscos, con un uso constante terminarían por dejar de excitar.
Y con las caricias pasa exactamente lo mismo. Tener sexo de forma tierna y cariñosa a veces satura, como desayunar todos los días un tazón de chocolate caliente.
No obstante cada persona se ve atraída por uno de los dos, y luchar contra ello es imposible ya que tarde o temprano esta represión termina saliendo a la luz en cantidades industriales.
Toneladas de cariño o toneladas de espíritu dominador.
¿Y tú, qué eres?

jueves, 11 de noviembre de 2010

Regalices

Como cuando dices:

- No, si a mi no me gusta el regalíz rojo. Sólo el negro, y a lo sumo el azul ese.
- ¿Seguro? Mira que no sabes lo que te pierdes...
- Si, ¡claro! Si no se yo lo que me gusta, ¿quién lo va a saber?

Entonces llegas a casa y dices, veenga... y zas! Lo pruebas y efectivamente, te gusta. No, no te gusta, te encanta, y desde ese momento hubieras deseado hacer caso a tu mente cerrada o a tu inexistente sentido aventurero y no haberlo probado, porque desde ese instante se vuelve una adicción. 

Sueñas con regalíz rojo, y cuando te levantas, lo haces con ganas del maldito regalíz. Cuando no sueñas, le das vueltas constantemente, como el anuncio aquel de... No pienses en un oso blanco

¿Y qué pasa con el regalíz negro? ¿Y con el de pica-pica? ¿Y el de colorines? ¿Y el de melocotón? ¿Y el blandito ese?
Nada. Eso pasa. Que aunque te pongan una gran caja con el surtido más variado que te puedas imaginar, los probarás, vale, pero...

Querrás regalíz rojo

martes, 9 de noviembre de 2010

Aceite, cama, cámara

La percepción que cada uno de nosotros tenemos respecto a adjetivos, sustantivos, adverbios y todo tipo de palabras que constituyen el mundo en el que vivimos, es diferente. Cada uno, según su estado de ánimo, vivencias, y las ganas con que mire las cosas interpretará de una manera u otra los aspectos que en ese momento lo rodean.

El otro día a modo de experimento sociológico, fui a un grupo de gente variada y pregunté qué era lo primero que les venía a la cabeza al escuchar las siguientes palabras: rojo, palo, verano, aceite, cama y cámara.
A decir verdad, esperaba respuestas más variadas, y debe ser que yo soy una pervertida, ya que pocos asociaban las palabras con temas sexuales. Con bola me encontré asociaciones como: billar, bolos o pelota; y con rojo la cosa fue desastrosa: ¡sangre, corazón, movimiento, izquierda, trapo y labio!

Espero al menos que al leer el título alguien se haya imaginado que iba a contar una historia o vivencia sexual... Si no es así, creo que es hora de empezar a plantearme seriamente mirarme lo mío.


¿Ver el doble sentido sexual de todo significa un alto grado de perversión? 

lunes, 8 de noviembre de 2010

Signo de admiración


¡Quiéreme!

Manifiéstate de súbito. Choquémonos como por arte mágico en el Bukonbski un miércoles. Pidámonos disculpas. Intentemos tirar el muro gélido diciéndonos las cuatro cosas típicas. Invitémonos a bebidas alcohólicas. Escúchame decir cosas estúpidas y ríete. Sorpréndete valorándome como oferta sólida.

Y a partir de ahí, ¡quiéreme!

Acómpañame a mi triste habitáculo. Relajémonos y pongamos música. De pronto, abalancémonos como bestias indómitas. Mordámonos, toquémonos, gritémonos. Permitámonos que todo sea válido. Y sin parar follémonos, follémonos hasta quedar afónicos, follémonos hasta quedar escuálidos.

Y al otro día, ¡quiéreme!

Unamos nuestro caminar errático. Descubramos restaurantes asiáticos. Compartamos películas. Celebremos nuestras onomásticas regalándonos fruslérías simbólicas. Comprémonos un piso. Hipotequémoslo. Llenémoslo con electrodomésticos y regalémosle nueve horas periódicas a trabajos insípidos que permitan rellenar el frigorífico.

Y mientras todo ocurre ¡solo quiéreme!

Continua queriéndome mientras pasan espídicas las décadas. Dejando que nos arrogen al hospital geriátrico. Inválidos, mirándonos sin más fuerza ni diálogo que el eco de nuestras vacías cáscaras.

¡Quiéreme!

Para que pueda decirte cuando vea la sombra de mi lápida ojalá, ojalá como dijo aquel filósofo el tiempo sea cícilico y volvamos reencarnándonos en dos vidas idénticas. Y cuando en el umbral redescubierto de una noche de miércoles pretérita, tras chocarme contigo girándote me digas "Uy, perdóname". Ruego que permita el Dios auténtico que recuerde el futuro de este cántico. Y anticipándolo pueda mirarte directo a los ojos. Y conociéndolo muy bien y sabiendo el devenir de futuras esdrújulas destrozando de un pisotón mi brújula te diga solo "quiéreme"...

Signo de admiración - Capman
http://www.youtube.com/watch?v=WqSW7dxCeQo

Cantidad o calidad

Al leer esto nos pueden venir a la mente diferentes variables; Tamaño, tiempo, expectativas, periodicidad…  Si se os ocurre alguna mas, comentad J

Hablemos del tamaño. Creo que es ampliamente sabido que la longitud no importa, así que situemos la cantidad en el grosor.  El tamaño del miembro está sobrevalorado (sobre todo por ellos), es decir, no voy a negar que sea relativamente importante, pero no lo es todo. Un tamaño generoso y mal usado, es peor que uno menor y apañado, además hay más factores como la actitud, el aguante, la maña en sectores orales o manuales y un amplio etcétera.

En cuanto al tiempo, ¿qué es preferible, un polvo corto pero intenso o largo pero mediocre? Hay bastantes quejas femeninas respecto al tiempo, a que es demasiado tiempo. Sí, he dicho demasiado. Claro que también las hay en cuanto al escaso tiempo, pero esas están más oídas. Mucho tiempo en el tema conlleva una cierta resistencia, ganas y lubricación, que debo recordar que esta última NO solo depende del género femenino. 

Expectativas. Apariencia o un pues me han dicho que… Influye de sobremanera. 
Periodicidad… No es lo mismo comer una caja de bombones un día por puro antojo, que estar comiendo cajas día sí, y día también.

En resumen, que este tema da conversación para rato, pero al fin y al cabo depende de los gustos de cada persona, ya que cada persona somos un mundo, pero tú... ¿qué prefieres?

¿Cantidad o calidad?

¿Amor o sexo?

Está claro que no es lo mismo hacer el amor, que echar un polvo. Hay gente que piensa, o que se obliga a pensar, que hacer el amor es lo mismo que el sexo, y eso no es así.

En primer lugar cuando haces el amor, los sentimientos hacia la otra persona se ven implicados, el trato va más allá que el simple y puro sexo, añadiendo una conexión especial. Sin embargo el sexo es eso, sexo. Sexo salvaje, suave, rápido o que dure horas, pero al fin y al cabo una serie de necesidades y ansias que desembocan en puro deseo; placer. A veces esto se ve traducido también en cierto egoísmo. ¿Hay algo peor que el egoísmo sexual? Pero bueno, ese es tema para otro momento.

Pero todo no es blanco o negro. Hay una amplia gama de grises porque los seres humanos tienen emociones que, para bien o mal, influyen de modo sorprendente y muchas veces inesperado en las relaciones. ¿Cuántas veces una relación de puro sexo ha acabado con sentimientos de por medio? 
Típico de: Bah, es un polvo, una alegría y nada más. Y de pronto te ves pensando en un futuro o dando cariño a alguien que veías como un pene o dos tetas.

O viceversa, claro. ¿Cuántas veces se ha acabado el amor, o que las ganas de seguir con alguien se basen principalmente a la cama?

¿Hacer el amor ata, o el sexo libera?

jueves, 28 de octubre de 2010

Puntillas o ballenas ¿qué más da?

Cita importante o prometedora y estás eligiendo la ropa interior. Abres el cajón. Miras…encajes, trasparencias, lacitos…  De pronto se cuelan unas de tus años oscuros, que claro, no es plan de tirarlas porque traen recuerdos, pero… uhm ¿acaso supondría un problema?

No.

No por la cuestión de que el género masculino sea más pervertido o menos, simplemente me baso en su escaso nivel de observación y análisis de nuestro esfuerzo, y su rapidez a lo flash  para desprender la ropa interior femenina.
Da igual que te pasees delante suyo veinte veces con un culotte semi transparente, camiseta blanca sin sujetador o un pose sexy a lo instinto básico, que él se limitara a decir: ¿No tienes frío?

¿Soy a la única que le pasa que por mucho que me pase buscando medio día las braguitas, culotte o tanga perfecto, luego da igual y te podrías haber puesto las más fosforitas, viejas y con bolitas de tus años mozos y habría dado igual?.

En fin, no obstante seguiré aquí sin aprender y siguiendo escogiendo lencería con transparencias y de raso simplemente para ir a clase, porque… ¿quién sabe? , claro que sabes, pero no lo quieres aceptar.

sábado, 23 de octubre de 2010

Activismo


¿Cómo decirles a tus padres que ya eres sexualmente activa?

Llevo dos días adelantando un trabajo que tenía pendiente, un trabajo de alto contenido sexual. Durante este tiempo he estado viendo montón de fotografías, imágenes, videos sexuales, y tras mucho mirar, he llegado una conclusión:

El sexo siempre vende



Si después de hacer el amor, das las gracias... eso es educación sexual :)

jueves, 21 de octubre de 2010

Pillame

Me has pillado
Es una frase vulgar, así que no voy a seguir.

Con esta frase nos sorprende el profesor de historia interrumpiendo el sermón de caciques y oligarquías. ¿Frase vulgar? Si, ha terminado con… en bragas.
¿Se puede saber por qué la mayoría de expresiones vulgares llevan connotaciones sexuales? Quizá sea porque al expresarnos de forma espontánea queremos trasmitir emociones intensas, solo comparables a la intensidad de los momentos sexuales.

Es una posible teoría.

El que empieza soplando nucas, termina mordiendo almohadas  J

miércoles, 20 de octubre de 2010

Déjate llevar

“Ponte una mano en el abdomen y déjate llevar”

Palabras insulsas o carentes de importancia durante dos horas de técnicas audiovisuales hasta que se oye esta frase. De repente se vuelve a hacer silencio, camuflando algunas risas nerviosas, y la clase entera centra su atención en el profesor.
En cuestión de segundos se da cuenta de la connotación que lleva, y tras una ligera sonrisa cambia de tema.

¿Por qué se le da tanta importancia a un tema tan terrenal y asumido? ¿Es acaso porque no lo está?

Aún en nuestros días, pleno siglo XIX, era de la modernidad y en la que todos sabemos y toleramos todo, ¿por qué el tema del sexo y en concreto la masturbación es todavía tabú?
Se podría decir que se trata de una paradoja ya que dichos temas son los que más morbo y curiosidad despiertan en cualquier reportaje, documental, conversación o vivencia. No obstante aún se puede diferenciar el grado o actitud con el que se habla en según que situaciones o ambientes. No es lo mismo estar con compañeros de trabajo que con tus amigos de toda la vida.

Sin embargo, aún estando en la situación más favorable posible, el tema de la masturbación, en concreto femenina, se podría calificar como el más “conflictivo”. En numerosos sitios se puede leer que es prácticamente, por no decir igual de frecuente en ambos sexos, pero a la hora de la verdad…

¿A que se debe que esté “peor visto”?

Quizá su origen esté en que desde hace bastante tiempo, esto sin entrar en cuestiones colaterales relacionadas con diversos animales de género femenino, el género masculino se comporta de forma más desenvuelta, menos pudorosa con su cuerpo y por lo tanto, más propicia a contar con todo tipo de detalles delante de sus congéneres sus hazañas, tanto del tipo sexual como en la pesca, caza o el número de cervezas que ha conseguido beber. He ahí el famoso juego de la galleta.

La actitud femenina va en esta dirección, pero aún queda mucho por recorrer. Dejarse llevar bastante más.

Todo esto se reflexiona cuando el profesor manda aprender a respirar por la noche de forma relajada.

sábado, 9 de octubre de 2010

Preliminares

Como una pequeñas notas introductorias en una partitura, o la entradilla en un reportaje. Pero a pesar de leer constantemente lo divertidos, entretenidos y necesarios que son, creo que están sobrevalorados.
Es verdad que hay veces en las que te apetece más jugar un rato primero, pero de ahí a que eso se convierta en indispensable…
Los días en los que los coges con ganas he de admitir que son un pasatiempo tremendamente agradable, puede hasta darte pena que terminen. Sin embargo cuando no apetecen se convierten en una pérdida de tiempo; sólo piensas en el momento en el que la otra persona se canse y puedas pasar a mayores. Ya sea por prisa, falta de ganas o infinitos motivos personales de cada uno, pueden no apetecer. Claro que si lo dices por ahí puedes parecer interesada, directa o incluso suelta... Es lo que hay.
¿Por qué el hecho de querer algo de una manera u otra hace que cambie la imagen que tienen los demás de ti? ¿Acaso soy la única que se levanta cada día de un humor diferente?

viernes, 8 de octubre de 2010

Mi primera vez

Siempre hay una primera vez para todo, verdad? Es como escribir esta entrada, la primera vez cuesta....

Todo tiene un halo de perfección, romanticismo, ilusión, todo muy bonito si, pero luego vienen las dudas, los nervios y el miedo. De pronto el concepto que tenías de la cama cambia. Antes era un lugar seguro, apacible, tranquilo... De hecho, ¿quién no ha leido el monólogo ese del miedo sobre las sábanas blindadas? Pero de pronto pasa a ser EL lugar, planteándote incluso el empezar a dormir en el sofa.

Y claro, cuando tu estas por fin decidida, escuchas el "¿Pero estás segura?"
Que sí! Hazlo de una vez!! - piensas, porque claro, quedaría muy bipolar decirlo.
Si, ahora si - Dices timidamente.

Entonces es cuando ves asomarse el infensivo trozo de látex salir, y te das cuenta realmente de que la cosa va en serio. El camino sin retorno.

Llegó el momento
- ¡AY!¡OH!¡UH!¡IIIIIIIIIII! - Hay letras para todos los gustos.
- ¿Quieres que pare?
- ¡NO! Ni se te ocurra!!! (ahí es cuando sale la faceta loca psicópata masoquista)

De pronto llegas al oasis, y todo queda reducido a un increible bienestar. Ahi es cuando piensas, ha merecido la pena.

Poco a poco, y con persistencia empieza el ascenso a la cima.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Hola, soy Cerea

¡Bienvenidos a nuestro blog visitantes!

El día a día nos depara sorpresas, desilusiones, alegrías, problemas etc etc Aspectos de la vida cotidiana que son factor común en nuestra especie, pero que sin embargo, cada uno los vivimos de una forma.
Sí, tu día a día no es igual al mío o al de él, quizás esa sea una de las cosas por las que cada persona es única e irrpetible, y por lo tanto... especial.

Digamos que me puedo encontrar una GRAN magdalena de chocolate rellena de chocolate blanco, y ser la persona más feliz del mundo, y comerla en lo que dura un parpadeo. No obstante puede llegar otra persona y verla como un gran cúmulo de calorías vacías. Ó... comerla rápidamente y luego sentirse mal por su escasa fuerza de voluntad. 

¿Qué os parece si intentamos dar distintos puntos de vista para abrir nuestra mente?

Para terminar, ahí va una pregunta:

¿Qué es lo que siempre quisiste preguntar, y nunca te atreviste?

:)